Haré otros de tu cuerpo


Dinosaurios y el Día de muertos en México


Elaboré una pintura un poco distinta de lo habitual, con motivo de las fiestas del día de los muertos, la cultura apache lipani y un dinosaurio mexicano recientemente dedicado a Coahuila y los apaches, pero con antecedentes que provienen desde 1997.

Al principio, la intención era utilizar los colores de las festividades modernas para retratar un dinosaurio mexicano en un ambiente típico del día de muertos. Sin embargo, al informarme, encontré que en los estados del norte de México, donde se encontraron los restos de varias especies de dinosaurios, las tradiciones y las culturas son muy distintas de lo que se observa en la región del centro del país.

Por lo que decidí pintar una obra tomando como referencia parte de la mitología apache lipani, que se distribuye en varios estados del norte de México, entre ellos, Chihuahua, Nuevo León, Tamaulipas y Coahuila, así como uno de los dinosaurios emblemáticos de Coahuila,

Al respecto, la diversidad cultural que intervino en la conmemoración de los muertos, es mucho más diversa de lo que aparenta. El origen de las celebraciones del día de los muertos en México, abarca la fusión de muchas culturas que tienen en común los ciclos solares, lunares y agrícolas, así como la convivencia entre vivos y muertos.


A continuación, un poco del contexto cultural sobre las festividades típicas de estas fechas, lo que me llevó a considerar otra forma de abordar el tema. Más adelante, un breve repaso acerca de la mitología apache lipani, finalmente los antecedentes y las características del dinosaurio que sirvieron para la elaboración de “Haré otros de tu cuerpo”.


El colorido de los campos de cultivo de cempazúchil en lugares como Atlixco, Puebla, agregan atractivo al paisaje y representan la fusión de diversas tradiciones culturales. Imagen: Marco Antonio Pineda


Día de “Todos los Santos”, de “los Fieles Difuntos” y Halloween


En México, el mes de noviembre es uno de los más importantes. Los días 1 y 2, se celebra a los difuntos. La tradición se originó en Europa durante la Edad Media, se instauró el 1 de noviembre para honrar a “Todos los Santos”, principalmente como homenaje a los millares de mártires cristianos, también a los beatos y canonizados. Mientras que el 2 está dedicado a “los Fieles Difuntos”, para ayudar con oración, súplica y sufragio a los que “reposan en Cristo”, es decir, aquellas almas que están en el purgatorio debido a penitencias no cumplidas en vida.


El día de Todos los Santos fue establecido el dia 13 de mayo por el Papa Bonifacio IV en el año 609, para honrar a los protectores de la Iglesia. Años más tarde, el Papa Gregorio IV, lo cambió para hacerlo coincidir con las calendas de noviembre, es decir, los primeros días del mes.


Sin embargo, también concuerda con la festividad celta del Samhain, que se pronuncia “so-win”, “sah-wim” y “hallowen”, y se celebrada el 31 de octubre por comunidades célticas de Irlanda, Gales y Escocia.


El Halloween


Era una fiesta nocturna de año nuevo para celebrar el equinoccio de otoño y el solsticio de invierno, entre el crepúsculo del 31 de octubre y el 1 de noviembre. Durante la “noche vieja”, se extinguían todos los fuegos y se encendía una nueva hoguera (fuego nuevo). Se usaban huesos de animales sacrificados (bonfire), para llevar el fuego nuevo a los hogares.


Los celtas creían que en el año nuevo, los difuntos regresaban para convivir con los vivos, lo que explica el uso de los disfraces, máscaras y símbolos funerarios. Se colocaban nabos con una vela encendida a la puerta de las casas para guiar a los difuntos y se le ofrecían viandas a los malos espíritus. Posteriormente, los nabos se sustituyeron por calabazas cuando la tradición pasó de Irlanda a Estados Unidos.


En todo el continente europeo, la noche víspera de Todos los Santos, marca el cambio de otoño a invierno, en ese momento, los vivos podían visitar el mundo de los muertos y las almas convivían con sus familiares vivos.

Se pensaba que en ese día, estarían presentes las hadas, duendes y brujas montadas en sus escobas .

Dicha celebración, era considerada como pagana por el cristianismo.


El día de “los Fieles Difuntos”


El 2 de noviembre se celebra el día de los “Fieles Difuntos”, desde el año de 998, por iniciativa de San Odilón, el abad del monasterio de Cluny, Francia, para celebrar a los fieles difuntos un día después de la fiesta de Todos los Santos, en la que se conmemora a los fallecidos con sufragios, limosnas, ayunos y misas , con el propósito de ayudarlos en su estancia en el purgatorio.

De acuerdo con la Iglesia Católica, tiene su origen debido a una revelación divina que tuvo el sacristán de la Iglesia de San Pedro, quien le comunicó al abad la necesidad de crear una celebración al siguiente día de la fiesta de Todos los Santos.


Las celebraciones del 1 y 2 de noviembre, llegaron a México en el siglo XVI. Con el tiempo, el halloween, el 1 y 2 de noviembre se fusionaron en la cultura popular.


 

Las artesanías con calaveras forman parte de las tradiciones actuales del Día de muertos en México. Imagen: Marco Antonio Pineda


Las prácticas mortuorias en la época prehispánica


Los mexicas, tenían un calendario solar definido por un ciclo de 365 días, con divisiones llamadas veintenas, estaban basadas en ciclos lunares que regían ciclos agrícolas formado por 18 veintenas, llamadas Xiuhpohualli.

Al menos en cuatro de ellas se realizaban prácticas funerarias: la octava Miccailhuitontli (Fiesta pequeña de los muertos), la novena: Huey Miccailhuitl (Gran fiesta de los muertos), la decimo tercera: Tepeilhuitl (Fiesta de los cerros) y la decimo sexta. Tititl (encogimiento o envejecimiento). De las cuales, dos de ellas tienen un significado cercano a la celebración del día de muertos actual.


En el Tepeilhuitl, la décimo tercera veintena, la “Fiesta de los cerros”, celebrada entre el final del otoño y principios del invierno, (octubre-noviembre), era la época de cosecha de maíz, entonces, se dedicaban festividades a los cerros y sus moradores, los dioses del agua:Tláloc, Chalchihuitlicue y sus hermanos los tlaloques, en las que se elaboraban imágenes con manojos de madera vestidas con mantas que representaban personas que fallecieron ahogadas, o causadas por entidades acuáticas y que fueron enterradas (no incineradas). Las imágenes colocadas en altares, son las almas de los que habitaban el Tlalocán, el paraíso terrenal.


La veintena décimo sexta, el Tititl (encogimiento o envejecimiento), señala el comienzo del solsticio de invierno y el final del ciclo solar, es decir, el año. Estaba dedicado a Cihuacóatl, deidad femenina de la maternidad y la fertilidad, así como al quixebilotia (que significa en memoria) para los difuntos por muerte natural, de los que se decía que “habían llegado al sol poniente” y el cielo que les correspondía era el Mictlán. En memoria de los difuntos por muerte natural, se les colocaba una ofrenda sobre un petate con una imagen elaborada con un manojo de ocote vestido con manta además de artículos domésticos y alimentos. Al finalizar la celebración se encendía una antorcha y se quemaba todo.


El sentido de la vida en las culturas del norte de México


Las culturas del norte de México, entre ellos, los apaches, eran originarios de los bosques del noreste y migraron hacia el suroeste. Su mitología es abundante, basada en un concepto de un mundo dinámico y rituales espontáneos.


La mayor parte de sus creencias, están basadas en el presente y en la creación. Para los apache lipani, antes del origen del mundo, solo estaban los Hactcin, personificaciones de los poderes de la naturaleza. Ellos crearon primero la tierra, el mundo subterráneo y después el cielo. A la tierra la crearon con forma de mujer y la llamaron Madre. El cielo fue creado con forma de hombre y lo llamaron Padre. Ambos se miraban uno a otro, el cielo mirando hacia abajo y la tierra mirando hacia arriba.

Debido a que la información disponible sobre las tradiciones apache lipani, están enfocadas en la vida, utilicé parte de sus creencias acerca de la creación del mundo, utilizando al bisonte como una de las especies fundamentales en su cultura y la visión acerca del mundo cambiante en el que el dios Hactcin negro crea los animales a partir de un «ancestro» de barro. También utilicé un dinosaurio nombrado en honor a Coahuila y a la cultura apache lipani.

Los antecedentes de Coahuilasaurus

Los restos de Coahuilasaurus, fueron descubiertos en 1987 en el ejido Presa San Antonio, Municipio de Parras de la Fuente, Coahuila, por paleontólogos de la UNAM liderados por René Hernández Rivera, Luis Espinosa Arrubarrena y Shelton P. Applegate, en colaboración con el Grupo Antares (hoy SEPC), para ello, crearon el proyecto “El primer dinosaurio mexicano, armado, recolectado y preparado por mexicanos”.

El ejemplar holotipo IGM 6685, consiste en un fragmento anterior del cráneo de un hadrosaurio. En ese tiempo, la identidad de los restos era desconocida, sin embargo, sí reconocían el parecido con el hadrosaurio Kritosaurus. Fue hasta 2024 que formalmente se le reconoce como Coahuilasaurus lipani.


 

Vista lateral del holotipo IGM 6685. Imagen: Longrich et al, 2024

El nombre se compone de dos partes. La primera, hace referencia al Estado de Coahuila, y del griego sauros, ‘lagarto’; la segunda parte lipani, es un homenaje a la tribu apache lipani de Coahuila’. Coahuilasaurus vivió durante el Cretácico superior, hace unos 73 Ma, Los restos fueron encontrados en el ejido Presa San Antonio, municipio Parras de la Fuente, en el estado de Coahuila. Tenía una longitud aproximada de 8.0 m. Durante muchos años, al conjunto de restos, se le conocía popularmente como «Isauria», aunque de manera informal y tentativa, nos referíamos a los restos fósiles como Kritosaurus sp. El Museo de Geología de la UNAM, tiene en exhibición al público, el esqueleto montado hecho con réplicas en resina poliéster.

Entre 1989-1991, hice mi servicio social, mi estancia (y mi tesis de la Licenciatura en Biología por la BUAP, con un proyecto acerca del desarrollo de un método para la inferencia de patrones de color en dinosaurios), en el Museo de Geología de la UNAM, bajo la dirección de mi maestro, René Hernández Rivera. Como parte de mis actividades, hice un modelo tridimensional del cráneo del hadrosaurio a partir del ejemplar holotipo IGM 6685.

Para ello, utilicé como referencia el libro: Lull y Wright (1942), Hadrosaurian dinosaurs of North America, una de las publicaciones más completas conocidas entonces para informarme acerca de la morfología de hadrosaurios del género Kritosaurus, así como, distribución geográfica de los restos y la información paleoambiental. Además del modelo tridimensional, años después, en 1992, una vez terminado mi servicio social y la estancia en el museo, hice la primera restauración de la apariencia externa y el posible paleoambiente de «Isauria».


 

Restauración tridimensional del cráneo del ejemplar holotipo IGM 6685; conocido popularmente como «Isauria». La morfología está basada en Kritosaurus (hoy Gryposaurus) notabilis). Actualmente el ejemplar está reconocido como Coahuilasaurus lipani. Modelo en plastilina: Marco Antonio Pineda
 

 
Montaje del esqueleto de «Isaurua», con la réplica del cráneo en resina poliéster de la especie reconocida recientemente como Coahuilasaurus lipani, tal como se muestra para exhibición al público en el Museo de Geología de la UNAM. Imagen: Ramírez-Velasco, et al. 2021


Coahuilasaurus está clasificado dentro de la Familia Hadrosauridae, la cual está bien representada en el registro fósil y en México. Los hadrosaurios eran herbívoros, se alimentaban por medio de una batería dental formada por una gran cantidad de piezas dentales, la parte delantera de la boca era ancha con forma de pico, por lo que se les llama dinosaurios “pico de pato”. La mayor parte del tiempo caminaban a cuatro patas, ocasionalmente podían levantarse sobre las patas posteriores.

La información disponible a finales de los 80 y principios de los 90 del siglo XX, respecto a los hadrosaurios del género Kritosaurus, era escasa. Para elaborar el modelo del cráneo, fue necesario conocer el aspecto del cráneo de las especies de Kritosaurus más cercanas geográficamente a la región del municipio de Parras, Coahuila. Encontré que eran dos: Kritosaurus navajovius y tal vez K. incurvimanus (actualmente a éste último está asignado a Gryposaurus notabilis), Sin embargo, la forma general de la parte anterior del rostro del ejemplar holotipo IGM 6685, me pareció más semejante a la especie que en ese momento se conocía como Kritosaurus notabilis (actualmente es Gryposaurus notabilis) a pesar de que su distribución es más al norte que las dos primeras mencionadas anteriormente. Por lo que decidí utilizarlo como referencia principal .


 

Cráneo de Coahuilasaurus lipani y otros hadrosaurios similares como Gryposaurus notabilis y Kritosaurus navajovius. Imagen: Longrich et al, 2024

En 1992, hice la primera restauración de la apariencia externa de «Isauria» en un posible paleoambiente tomando como referencia la información de las especies de Kritosaurus descritas en Hadrosaurian dinosaurs…(1942). Al respecto, Lull y Wright, mencionan que los restos de Kritosaurus en Estados Unidos, están asociados a elementos botánicos como encino (Querqus), secoya (Sequoia), sauce llorón (Salix), magnolia (Magnolia), entre otros. Sin embargo, la información paleobotánica acerca de la región donde fueron encontrados los restos del holotipo IGM 6685, en 1992 estaba en una fase de estudio. En 1993, hice una segunda interpretación a blanco y negro mostrando una escena don dos ejemplares en el lecho seco de un lago con vegetación «tropical» al fondo.


 

Primera interpretación artística de la apariencia externa de «Isauria» con información paleoambiental de las especies de Kritosaurus conocidas a mediados del siglo XX, con base en los restos encontrados en Estados Unidos. Kritosaurus sp. 1992. Marco Antonio Pineda. Óleo sobre lienzo. 30.0 x 40.0. Colección del autor. Imagen: Marco Antonio Pineda
 
 

Segunda interpretación de «Isauria», que muestra dos ejemplares en el lecho seco de un cuerpo de agua y vegetación tropical no identificada al fondo. Pareja de Kritosaurus sp. Marco Antonio Pineda. Grafito. Imagen: Marco Antonio Pineda

En 2017, un estudio, redescribe los restos de Gryposarus notabilis, un hadrosaurio emparentado con Kritosaurus y Coahuilasaurus. En la publicación, se muestran varios aspectos morfológicos con más claridad que lo conocido anteriormente, como la postura, apariencia de las extremidades y la presencia de una hilera de escamas dorsales. Dicho artículo, es de gran utilidad para inferir el posible aspecto de hadrosaurios como Coahuilasaurus.

 

Reconstrucción esquelética del hadrosaurio canadiense Gryposaurus notabilis, Imagen: Bertozzo et al (2017)


El mismo territorio y hábitos similares


Los restos del hadrosaurio Coahuilasaurus lipani proceden de las cercanías de la ciudad de Saltillo capital del estado de Coahuila. En esa región, abundaba el bisonte (Bison bison). El bisonte es una especie de importancia para las culturas del norte, como los apaches.


Los rastros fósiles, conocidos como icnitas, atribuidos a hadrosaurios, sugieren que vivían en grupo. Mientras que, el bisonte (Bison bison), también es un animal gregario. Los relatos de los viajeros durante la colonización de los territorios del oeste, en Estados Unidos, revelan que se encontraban manadas muy grandes. El bisonte estuvo cerca cerca de la extinción debido en gran parte a la caza excesiva. Actualmente, las poblaciones de bisonte en México se recuperan gracias a programas de reproducción y reintroducción en la Reserva de la Biósfera de Janos, Chichuahua.

 
 

El bisonte (Bison bison), estuvo a punto de extinguirse en México. Sin embargo, gracias a los programas de conservación, las poblaciones silvestres se recuperan poco a poco. En la fotografía, ejemplares de bisonte en cautiverio. Imagen: Marco Antonio Pineda


La fusión del pasado distante y el presente

Para la elaboración de la obra, utilicé parte de las creencias de la cultura apache lipani acerca de la creación del universo y los restos de dinosaurios como Coahuilasaurus encontrados en la región.

En un enfoque técnico, la composición está diseñada en forma de triángulo, destacando la presencia de Coahuilasaurus en la parte central por encima de los bisontes en una escena vista con un horizonte bajo colocado a una tercera parte con el propósito de utilizar el espacio dedicado al cielo y destacar la figura del dinosaurio.

La escena se desarrolla de izquierda a derecha. En la mitología apache lipani, los eventos de la creación de las aves, siguió el sentido de las agujas del reloj, cuando el dios Hactcin Negro, hizo girar a la primera ave hecha con barro, de la que surgieron otras aves.

Utilicé pintura acrílica, este medio artístico es útil cuando se requiere trabajar texturas complejas, además es posible aplicar capas traslúcidas y espesas. Respecto al color, decidí una paleta con colores poco saturados, Para ello, elegí una paleta compuesta por cinco colores: blanco de Titanio (Titanium white), amarillo ocre (yellow oxide), aunque también se le encuentra como amarillo de Marte, óxido rojo (red oxide) y negro de Marte (Mars black), utilicé violeta azul claro (light blue violet) con el propósito de agregar un poco de saturación.

En el cielo y la vegetación utilicé varias capas opacas alternadas con capas transparentes. Con los bisontes y el dinosaurio, utilicé principalmente varias capas opacas y algunas traslúcidas. En el extremo izquierdo, aplique unas capas traslúcidas con el objetivo de sugerir un proceso de creación-sucesión.

Con el propósito de resolver problemas de volumen, elaboré un modelo tridimensional que sirvió para observar detalles como ángulos y proyección de sombras que sirvieron para agregar realismo a la interpretación artística.

 

Modelo tridimensional de Coahuilasaurus. Imagen: Marco Antonio Pineda

El contexto mitológico y científico

En la cultura apache lipani, la creación de los animales fue obra del dios Hactcin Negro, el más poderoso de los Hactcin, los que sostienen el universo. Él hizo un animal de barro y le dijo: «Déjame ver cómo vas a andar con esas cuatro patas.», después dijo el dios: «Eso está muy bien»…

Lo siguiente fue tomado del portal sabiduria.es:

…» dijo el Hactcin, «Puedo utilizarte.» Y luego dijo, “Pero estás solo. Haré otros de tu cuerpo.” Y toda clase de animales salieron de aquel único cuerpo, porque Hactcin Negro tenía poder: podía hacer cualquier cosa.»



Haré otros de tu cuerpo. 2024. Marco Antonio Pineda. Acrílico. 35.0 x 50.0 cm.

La obra está elaborada desde un punto de vista simbólico, tomando elementos de la realidad, en la que un ejemplar de Coahuilasaurus representa la biodiversidad de dinosaurios que vivió en ambientes tropicales cercanos a la costa, a la vez que, es uno de los animales creados por el dios Hactcin Negro a partir de un ancestro original desconocido hecho con barro.

Millones de años después de la extinción cretácica, otros herbívoros (representados por tres bisontes), evolucionaron para aprovechar los recursos en el mismo territorio en el que vivió Coahuilasaurus, pero con otro clima, otro paisaje y otras amenazas.

En la mitología apache lipani, el mundo está cambiando constantemente. Desde la biología, las especies se adaptan a las condiciones ambientales en un proceso dinámico permanente a través de la evolución. Cuando evoluciona un nuevo linaje, éste aprovecha los recursos disponibles por medio de adaptaciones que muchas veces se observa en la morfología.

Los herbívoros como los hadrosaurios y el bisonte, están conectados por la ecomorfología, la disciplina que estudia la interacción morfológica con el ambiente. Ambos herbívoros desarrollaron adaptaciones que les permiten alimentarse de la vegetación (por ejemplo, una dentadura para cortar y masticar las plantas), articulaciones que les permiten recorrer distancias considerables para migrar en busca de condiciones ambientales favorables, como sucede con el bisonte, aunque este aspecto es desconocido en Coahuilasaurus. Otros patrones de comportamiento que comparten, consiste en el desarrollo estrategias para evitar la depredación por medio de la organización social en grupo.


Coahuilasaurus lipani y Bison bison, son especies emblemáticas, representativas de ecosistemas separados en el tiempo por millones de años, que vivieron en la misma región geográfica. Ambas especies son animales herbívoros gregarios adaptados para aprovechar los recursos a su alcance. Mientras que los dinosaurios, entre ellos, los hadrosaurios, enfrentaron sin éxito una extinción masiva a finales del Cretácico, el bisonte, estuvo cerca de la extinción debido a la cacería.

Referencias


Bertozzo, Filippo & Dal Sasso, Cristiano & Fabbri, Matteo & Manucci, Fabio & Maganuco, Simone. (2017). Redescription of a remarkably large Gryposaurus notabilis (Dinosauria: Hadrosauridae) from Alberta, Canada.


Domínguez-Viveros, Joel, Aguilar-Palma, Guadalupe Nelson, Villa-Angulo, Rafael, Hernández-Rodríguez, Nancy, Pérez-Cantú, José Manuel, Moir, Flora, & Calderón-Domínguez, Pedro. (2023). Estructura y variabilidad genética del bisonte americano (Bison bison) en México. Revista mexicana de ciencias pecuarias, 14(2), 339-348. Epub 26 de junio de 2023.https://doi.org/10.22319/rmcp.v14i2.6250


Longrich, N.R.; Ramirez Velasco, A.A.; Kirkland, J.; Bermúdez Torres, A.E.; Serrano-Brañas, C.I. Coahuilasaurus lipani, a New Kritosaurin Hadrosaurid from the Upper Campanian Cerro Del Pueblo Formation, Northern Mexico. Diversity 2024, 16, 531.



Ramírez-Velasco, A. A., Espinosa-Arrubarrena, L., Alvarado-Ortega, J. (2021) Review of the taxonomic affinities of Latirhinus uitstlani, an emblematic Mexican hadrosaurid, Journal of South American Earth Sciences, Volume 110


Sullivan, Robert & Lucas, Spencer. (2015). Cretaceous vertebrates of New Mexico. New Mexico Museum of Natural History and Science Bulletin. 68. 105-129.

Consultas en línea

INAH. El origen del Día de Muertos

José Alberto Jiménez Peris. Cosmogonía norteamericana

Historia National Geographic. Halloween, el origen milenario de la fiesta más terrorífica

sabiduria.es. El chamán y el sacerdote


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